Mientras pensaba en todo esto, un *ángel de Dios se le apareció en un sueño y le dijo: «José, no tengas miedo de casarte con María. El Espíritu *Santo fue quien hizo que ella quedara embarazada.
De repente, un ángel de Dios se presentó, y una luz brilló en la cárcel. El ángel tocó a Pedro para despertarlo y le dijo: 'Levántate, date prisa'.
En ese momento las cadenas se cayeron de las manos de Pedro,
Cuando Dios creó el mundo, dijo: 'Que brille la luz donde ahora hay oscuridad'. Y cuando nos permitió entender la buena noticia, también iluminó nuestro entendimiento, para que por medio de Cristo conociéramos su grandeza.
No hay duda de que es muy profunda la verdad de la religión cristiana:
Cristo vino al mundo como hombre.
El Espíritu lo declaró inocente.
Los ángeles lo vieron.
Su mensaje se anunció
entre las naciones,
y el mundo creyó en él.
Fue llevado al cielo
y Dios lo colmó de honores.