Cuando Herodes vio a Jesús, se puso muy contento, porque hacía tiempo que quería conocerlo. Había oído hablar mucho de él y esperaba verlo hacer un milagro.
Ellos fueron a un pueblo de Galilea para ver a Felipe, uno de los discípulos de Jesús, y le dijeron:
--Señor, queremos ver a Jesús.
Felipe, que era de Betsaida,