Un líder de los judíos fue a ver a Jesús y le preguntó: --Tú, que eres un maestro bueno, dime, ¿qué cosa debo hacer para tener vida eterna?
Jesús le contestó: --¿Por qué dices que soy bueno? Sólo Dios es bueno.
Jesús continuó diciendo: 'Ustedes dicen que yo soy su Señor y su dueño, pero no hacen lo que yo les ordeno.
Luego sacó a los dos de la cárcel y les preguntó: --Señores, ¿qué tengo que hacer para salvarme?
Todos los que oyeron estas palabras se pusieron muy tristes y preocupados. Entonces les preguntaron a Pedro y a los demás apóstoles: --Amigos israelitas, ¿y qué debemos hacer?