Miró entonces a los que estaban allí y les dijo: '¡No vivan siempre deseando tener más y más! No por ser dueños de muchas cosas se vive una vida larga y feliz'.
'¡Tengan cuidado! No pasen el tiempo pensando en banquetes y borracheras, ni en las muchas cosas que esta vida les ofrece. Porque el fin del mundo podría sorprenderlos en el momento menos esperado.
Las semillas que cayeron entre espinos representan a los que oyen el mensaje, pero no dejan que el mensaje cambie sus vidas, pues viven preocupados por tener más dinero y por divertirse.
Por eso, den muerte a todos sus malos deseos; no tengan relaciones sexuales prohibidas, no sean indecentes, dominen sus malos deseos y no busquen amontonar dinero, pues es lo mismo que adorar a dioses falsos.
Habrá gente egoísta, interesada solamente en ganar más y más dinero. También habrá gente orgullosa que se creerá más importante que los demás. No respetarán a Dios ni obedecerán a sus padres, sino que serán malagradecidos e insultarán a todos.
Estos hombres no pueden ver a una mujer sin desear tener relaciones sexuales con ella, y nunca se cansan de pecar. Engañan a los que no confían mucho en Cristo, y son muy buenos para conseguir lo que desean. Esta gente será castigada por Dios; ¡de eso no hay duda!
Esos falsos maestros desearán tener más y más dinero, y lo ganarán enseñándoles mentiras. Pero Dios ya decidió castigarlos desde hace mucho tiempo, y no se salvarán de ese castigo.