Jesús se dio cuenta de que la gente quería llevárselo a la fuerza para hacerlo su rey. Por eso se fue a lo alto del cerro para estar solo. Jesús camina sobre el agua
Ella le respondió:
--Así es, Señor. Nadie me ha condenado
Jesús le dijo:
--Tampoco yo te condeno. Puedes irte, pero no vuelvas a pecar. Jesús es la luz
Cuando alguno de ustedes acusa a otro de hacer algo malo, él solo se acusa porque también hace lo mismo. Así que, no tiene ninguna razón de acusar y juzgar a otro,
yo le contestaría: 'Amigo mío, tú no eres nadie para cuestionar las decisiones de Dios'. La olla de barro no puede quejarse con el que la hizo, de haberle dado esa forma.