Cuando llegaron, comenzaron a acusar a Jesús y dijeron:
--Señor gobernador, encontramos a este hombre alborotando al pueblo para que se rebele contra Roma. Dice que no debemos pagar impuestos al Emperador, y que él es el Mesías. Es decir, se cree rey.
cortaron ramas de palmera y salieron a encontrarlo, gritando:
'¡Sálvanos, oh Dios!
¡Bendito el que viene de parte de Dios!
¡Bendito sea el Rey de Israel!'
--Entonces sí eres rey --replicó Pilato--.
Y Jesús le contestó:
--Si tú lo dices... Yo por mi parte vine al mundo para hablar acerca de la verdad. Y todos los que conocen y dicen la verdad me escuchan.
--¿Y qué es la verdad? --preguntó Pilato--.
Después de decir esto, Pilato regresó a donde estaba la gente, y le dijo:
'No encuentro ninguna razón para castigar a este hombre. Pilato permite la muerte de Jesús
A partir de ese momento, Pilato buscó la manera de dejar libre a Jesús, pero la gente gritó:
--¡Si dejas libre a ese hombre, no eres amigo del emperador romano! ¡Cualquiera que quiera hacerse rey, es enemigo del emperador!