Pedro y Juan fueron llevados a la presencia de todos ellos, y ellos empezaron a preguntarles:
--¿Quién les ha dado permiso para enseñar a la gente? ¿Quién les dio poder para hacer milagros?
Ya estaba por amanecer cuando los apóstoles llegaron frente al templo y empezaron a hablarle a la gente.
Mientras tanto, el jefe de los sacerdotes y sus ayudantes reunieron a toda la Junta Suprema y a los líderes del pueblo. Después mandaron traer a los apóstoles,