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Referencias Cruzadas

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Hechos 27:2

Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento)

Fuimos llevados al puerto de Adramitio. Allí, un barco estaba a punto de salir para hacer un recorrido por los puertos de la provincia de Asia. Con nosotros estaba también Aristarco, que era de la ciudad de Tesalónica, en la provincia de Macedonia. Subimos al barco y salimos.

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17 Referencias Cruzadas  

Un día, Jesús subió a una barca con sus discípulos y les dijo: 'Vamos al otro lado del lago'. Partieron,

La muchacha nos seguía y gritaba a la gente: '¡Estos hombres trabajan para el Dios Altísimo, y han venido a decirles que Dios puede salvarlos!'

Pablo y Silas continuaron su viaje. Pasaron por las ciudades de Anfípolis y Apolonia, y llegaron a la ciudad de Tesalónica, donde había una sinagoga de los judíos.

Otros, que habían sido brujos, traían sus libros de brujería y los quemaban delante de la gente. Y el valor de los libros quemados era como de cincuenta mil monedas de plata.

Entonces toda la gente de la ciudad se alborotó, y algunos fueron y apresaron a Gayo y a Aristarco, los dos compañeros de Pablo que habían venido de Macedonia, y los arrastraron hasta el teatro.

Los que estamos aquí somos de diferentes países. Algunos somos de Partia, Media y Elam. Otros vinimos de Mesopotamia, Judea, Capadocia, Ponto, Asia,

Pasados los siete días decidimos seguir nuestro viaje. Todos los hombres, las mujeres y los niños nos acompañaron hasta salir del poblado. Al llegar a la playa, nos arrodillamos y oramos.

En esa isla pasamos tres meses. La gente de allí nos atendió muy bien y nos dio de todo. Luego, cuando subimos a otro barco para irnos, nos dieron todo lo necesario para el viaje. El barco en que íbamos a viajar era de Alejandría, y había pasado el invierno en la isla. Estaba cargado de trigo, y por la parte delantera tenía la figura de los dioses Cástor y Pólux.

Salimos en el barco y llegamos al puerto de Siracusa, donde pasamos tres días.

Al llegar a la ciudad, las autoridades permitieron que Pablo viviera aparte y no en la cárcel. Sólo dejaron a un soldado para que lo vigilara. Pablo en Roma

Los habitantes de la isla nos trataron muy bien, y encendieron un fuego para que nos calentáramos, porque estaba lloviendo y hacía mucho frío.

Aristarco, que está preso conmigo, les envía saludos. También los saluda Marcos, el primo de Bernabé. Si él llega a visitarlos, no dejen de recibirlo.

También te envían saludos mis compañeros de trabajo Marcos, Aristarco, Demas y Lucas.




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