Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Gálatas 2:19

Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento)

Para la ley estoy muerto, y lo estoy por causa de la ley misma. Sin embargo, ¡ahora vivo para Dios!

Ver Capítulo Copiar

28 Referencias Cruzadas  

Dios castiga a los que desobedecen la ley. Pero cuando no hay ley, nadie es culpable de desobedecerla.

La ley apareció para que el pecado se hiciera fuerte. Pero si bien el pecado se hizo fuerte, el amor de Dios lo superó.

De igual manera, el pecado ya no tiene poder sobre ustedes, sino que Cristo les ha dado vida, y ahora viven para agradar a Dios.

Así el pecado ya no tendrá poder sobre ustedes, porque ya no son esclavos de la ley. Ahora están al servicio del amor de Dios. Al servicio de Dios

¡Por supuesto que no! Nosotros ya no tenemos nada que ver con el pecado, así que ya no podemos seguir pecando.

Nosotros sabemos que la ley viene de Dios. Pero yo no soy más que un simple hombre, y no puedo controlar mis malos deseos. Soy un esclavo del pecado.

Algo parecido sucede con ustedes, mis hermanos. Por medio de la muerte de Cristo, ustedes ya no están bajo el control de la ley. Ahora ustedes son de Cristo, a quien Dios resucitó. De modo que podemos servir a Dios haciendo el bien.

Ahora, por estar unidos a él, el Espíritu Santo nos controla y nos da vida, y nos ha librado del pecado y de la muerte.

Cuando ustedes coman, o beban, o hagan cualquier otra cosa, háganlo para honrar a Dios.

Cuando estoy con los judíos, vivo como judío para ayudarlos a creer en Cristo. Por eso cumplo con la ley de Moisés, aunque en realidad no estoy obligado a hacerlo.

Así que, si Cristo murió por nosotros, entonces ya no debemos vivir más para nosotros mismos, sino para Cristo, que murió y resucitó para darnos vida.

En realidad, también yo he muerto en la cruz, junto con Jesucristo. Y ya no soy yo el que vive, sino que es Jesucristo el que vive en mí. Y ahora vivo gracias a mi confianza en el Hijo de Dios, porque él me amó y quiso morir para salvarme.

Pero corren un grave peligro los que buscan agradar a Dios obedeciendo la ley, porque la Biblia dice: 'Dios maldecirá al que no obedezca todo lo que la ley ordena'.

La ley fue como un maestro que nos guió y llevó hasta Cristo, para que Dios nos aceptara por confiar en él.

Yo, en cambio, sólo me sentiré orgulloso de haber creído en la muerte de nuestro Señor Jesucristo. Gracias a su muerte, lo que este mundo malo piense de mí ya no me importa; es como si para este mundo yo ya hubiera muerto.

Ustedes están unidos a Cristo por medio de su muerte en la cruz, y ya no están sometidos a los espíritus que gobiernan este mundo. Entonces, ¿por qué se comportan como si todavía estuvieran bajo su dominio? ¿Por qué obedecen a quienes les dicen

Pues ustedes ya han muerto para el mundo, y ahora, por medio de Cristo, Dios les ha dado la verdadera vida. Cuando Cristo venga, también ustedes estarán con él y compartirán su gloriosa presencia. Cómo deben vivir ahora

Porque Jesucristo murió por nosotros para que podamos vivir con él, ya sea que estemos vivos o muertos cuando él vuelva.

Él quiso morir para rescatarnos de todo lo malo y para purificarnos de nuestros pecados. Al hacerlo, nos convirtió en su pueblo, en un pueblo decidido a hacer el bien.

Y si todo eso tiene poder, más poder tiene la sangre de Cristo. Pues por medio del Espíritu que vive para siempre, Cristo se ofreció a sí mismo a Dios como sacrificio sin mancha ni pecado. Su sangre nos purifica para que estemos seguros de que hemos sido perdonados, y para que podamos servir a Dios, que vive para siempre. El nuevo pacto

Cristo hizo suyos nuestros pecados, y por eso murió en la cruz. Lo hizo para que nosotros dejemos por completo de hacer el mal y vivamos haciendo el bien. Cristo fue herido para que ustedes fueran sanados.

Porque para eso anunció Cristo la buena noticia aun a los muertos: para que después de que Dios los juzgue por lo que hicieron en vida, sus espíritus puedan vivir con Dios. El servicio a los demás




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios