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Referencias Cruzadas

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1 Corintios 3:18

Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento)

¡No se engañen a ustedes mismos! Si alguno cree que es muy sabio y que sabe mucho de las cosas de este mundo, para ser sabio de verdad debe comportarse como un ignorante.

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29 Referencias Cruzadas  

'Luego están las semillas que cayeron entre los espinos. Estas semillas representan a los que oyen el mensaje, pero no dejan que este cambie sus vidas. Sólo piensan en lo que necesitan y en cómo hacerse ricos.

Porque en el reino de Dios, las personas más importantes son humildes como este niño.

Les aseguro que si alguien no confía en Dios como lo hace un niñito, no podrá ser parte del reino de Dios'.

Les aseguro que la persona que no confía en Dios como lo hace un niño, no podrá entrar en el reino de Dios'. El hombre rico

Jesús les respondió: --¡Cuidado! No se dejen engañar. Muchos vendrán y se harán pasar por mí, diciendo a la gente: 'Yo soy el Mesías', o 'Ya ha llegado la hora'. Pero no les hagan caso.

Hermanos en Cristo, hay mucho que ustedes todavía no saben. Por eso voy a explicarles el plan que Dios tenía en secreto. Algunos de los judíos se han vuelto muy tercos y no quieren creer en Jesucristo. Pero sólo se portarán así hasta que los no judíos pasen a formar parte de su pueblo.

Vivan siempre en armonía. Y no sean orgullosos, sino traten como iguales a la gente humilde. No se crean más inteligentes que los demás.

¡No se dejen engañar! Bien dice el dicho, que 'Las malas amistades echan a perder las buenas costumbres'.

Ustedes son el templo santo de Dios, y a cualquiera que destruya su templo Dios también lo destruirá.

Por obedecer a Cristo, la gente nos considera tontos. En cambio, gracias a Cristo, a ustedes los consideran sabios. Nosotros somos los débiles, y ustedes los fuertes. A ustedes los respetan, y a nosotros no.

No se dejen engañar. Ustedes bien saben que los que hacen lo malo no participarán en el reino de Dios. Me refiero a los que tienen relaciones sexuales prohibidas, a los que adoran a los ídolos, a los que son infieles en el matrimonio, a los hombres que se comportan como mujeres, a los homosexuales, a los ladrones, a los que siempre quieren más de lo que tienen, a los borrachos, a los que hablan mal de los demás, y a los tramposos. Ninguno de ellos participará del reino de Dios.

Si alguien se cree importante, cuando en realidad no lo es, se está engañando a sí mismo.

No crean ustedes que pueden engañar a Dios. Cada uno cosechará lo que haya sembrado.

No se dejen engañar con ideas tontas, pues por cosas así Dios castigará terriblemente a quienes no le obedecen.

Pero los malvados y los engañadores irán de mal en peor, y engañarán a unos pero serán engañados por otros.

Antes, nosotros mismos éramos ignorantes y desobedientes, y andábamos perdidos. Hacíamos todo lo malo que se nos ocurría para divertirnos. Fuimos esclavos de esos malos deseos. Éramos malvados y envidiosos. Todo el mundo nos odiaba, y nosotros también odiábamos a los demás.

¡Obedezcan el mensaje de Dios! Si solo lo escuchan y no lo obedecen, se engañan a ustedes mismos y les sucederá lo mismo que a quien se mira en un espejo: tan pronto como se va, se olvida de cómo era.

Quien se cree muy *santo y no cuida sus palabras, se engaña a sí mismo y de nada le sirve tanta religiosidad.

Si decimos que no hemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no decimos la verdad.




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