Hijo mío, si salieres fiador por tu amigo, si prometiste al extraño,
Yo lo fío; a mí me pedirás cuenta de él: si yo no te lo volviere y lo pusiere delante de ti, seré para ti el culpable todos los días;
Pon ahora, dame fianzas contigo; ¿quién tocará ahora mi mano?
Con ansiedad será afligido el que fiare al extraño; mas el que aborreciere las fianzas vivirá confiado.
El hombre falto de entendimiento toca la mano, fiando a otro delante de su amigo.
Quítale su ropa al que salió por fiador del extraño; y tómale prenda al que fía la extraña.
No estés entre los que tocan la mano, entre los que fían por deudas.
Quítale su ropa al que fio al extraño; y al que fio a la extraña, tómale prenda.
enlazado eres con las palabras de tu boca, y preso con las razones de tu boca.
Ciertamente tú has dejado tu pueblo, la casa de Jacob, porque son henchidos de oriente, y de agoreros, como los filisteos; y en hijos ajenos descansan.
Tanto de mejor testamento es hecho prometedor Jesús.