Encomienda al SEÑOR tus obras, y tus pensamientos serán afirmados.
Determinarás asimismo una cosa, y te será firme; y sobre tus caminos resplandecerá luz.
Ciertamente yo buscaría a Dios, y depositaría en él mis negocios;
Echa sobre el SEÑOR tu carga, y él te sustentará; nunca permitará que resbale el justo.
Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas.
Y dijo a sus discípulos: Por tanto os digo: No estéis afanosos de vuestra vida, qué comeréis; ni del cuerpo, qué vestiréis.
Por nada estéis afanosos; sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en todo con oración y ruego y acción de gracias.
echando toda vuestra solicitud en él; porque él tiene cuidado de vosotros.