La sana lengua es árbol de vida; mas la perversidad en ella es una brecha en el espíritu.
Porque yo soy pobre y necesitado; y mi corazón está herido dentro de mí.
Vena de vida es la boca del justo; mas la boca de los impíos cubre la iniquidad.
Hay quienes hablan como dando estocadas de espada; mas la lengua de los sabios es medicina.
Los ojos del SEÑOR están en todo lugar, mirando a los malos y a los buenos.
El loco menosprecia el castigo de su padre; mas el que guarda la corrección, saldrá cuerdo.
Panal de miel son los dichos suaves; suavidad al alma y medicina a los huesos.
El espíritu del hombre soportará su enfermedad; mas ¿quién soportará al espíritu quebrantado?
Las palabras del chismoso parecen blandas, mas ellas descienden hasta lo íntimo del vientre.
Las palabras del chismoso parecen blandas; mas ellas entran hasta lo secreto del vientre.
Ella es árbol de vida a los que de ella echan mano; y bienaventurados son los que la mantienen.
Mas a vosotros los que teméis mi Nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salud; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada.
El que enseña otra cosa, y no se allega a las sanas palabras del Señor nuestro, Jesús, el Cristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad;
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias: Al que venciere, daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del Paraíso de Dios.