Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.
espinos y cardos te producirá, y comerás hierba del campo;
Y el que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la Palabra; pero la congoja de este siglo y el engaño de las riquezas, ahogan la Palabra, y se hace infructuosa.
mas saliendo el sol, se quemó; y se secó, porque no tenía raíz.
Y parte cayó en buena tierra, y dio fruto: uno a ciento, y otro a sesenta, y otro a treinta.
Otra parte cayó en espinas; y subieron las espinas, y la ahogaron, y no dio fruto.
Otra parte cayó entre las espinas; y naciendo las espinas juntamente, la ahogaron.