Y después de estas cosas salió, y vio a un publicano llamado Leví, sentado al banco de los tributos públicos , y le dijo: Sígueme.
Felipe, y Bartolomé; Tomás, y Mateo el publicano; Jacobo hijo de Alfeo, y Lebeo, por sobrenombre Tadeo;
Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su madero, y sígame.
Y Jesús le dijo: Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos.
y a Andrés, y a Felipe, y a Bartolomé, y a Mateo, y a Tomás, y a Jacobo hijo de Alfeo, y a Tadeo, y a Simón el cananista,
Y Jesús, oído esto, le dijo: Aún te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
El siguiente día quiso Jesús ir a Galilea, y halla a Felipe, al cual dijo: Sígueme.
El que me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Al que me sirviere, mi Padre le honrará.