diciendo: ¿Qué quieres que te haga? Y él dijo: Señor, que vea.
Jesús entonces parándose, mandó traerle a sí; y cuando él llegó, le preguntó,
Y Jesús le dijo: Ve, tu fe te ha hecho salvo.
Pues si lo que no vemos lo esperamos, por paciencia lo esperamos.
Por nada estéis afanosos; sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en todo con oración y ruego y acción de gracias.