Entonces María dijo: He aquí la criada del Señor; cúmplase en mí conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia.
Así es oh SEÑOR, porque yo soy tu siervo, yo soy tu siervo, hijo de tu sierva; tú rompiste mis prisiones.
Confirma tu palabra a tu siervo, que te teme.
porque ninguna cosa es imposible para Dios.
En aquellos días levantándose María, fue a la montaña con prisa, a una ciudad de Judá;
porque miró a la bajeza de su criada; Porque he aquí, desde ahora me dirán bienaventurada todas las generaciones.
Porque escrito está que Abraham tuvo dos hijos; uno de la sierva, el otro de la libre.