Porque en este día se os reconciliará para limpiaros; y seréis limpios de todos vuestros pecados delante del SEÑOR.
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio; y renueva un espíritu recto dentro de mí.
Lávame más y más de mi maldad, y límpiame de mi pecado.
Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré emblanquecido más que la nieve.
Y los limpiaré de toda su maldad con que pecaron contra mí; y perdonaré todos sus pecados con que contra mí pecaron, y con que contra mí se rebelaron.
Pero a los diez de este mes séptimo será el día de las expiaciones; tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas, y ofreceréis ofrenda encendida al SEÑOR.
Ninguna obra haréis en este mismo día; porque es día de expiaciones, para reconciliaros delante del SEÑOR vuestro Dios.
para santificarla limpiándola en el lavamiento del agua por la palabra,
Que se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y limpiar para sí un pueblo propio, seguidor de buenas obras.