Todo lo que no tuviere aletas y escamas en las aguas, lo tendréis en abominación.
Entonces Aarón extendió su mano sobre las aguas de Egipto, y subieron ranas que cubrieron la tierra de Egipto.
Os serán, pues, en abominación; de su carne no comeréis, y abominaréis sus cuerpos muertos.
Y de las aves, éstas tendréis en abominación; no se comerán, serán abominación: el águila, el quebrantahuesos, el esmerejón,