Y Judá dijo a Simeón su hermano: Sube conmigo a mi suerte, y peleemos contra el cananeo, y yo también iré contigo a tu suerte. Y Simeón fue con él.
Y concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Por cuanto oyó el SEÑOR que yo era aborrecida, me ha dado también éste. Y llamó su nombre Simeón.
Y dijo: Si los Sirios me fueren superiores, tú me ayudarás; y si los hijos de Amón pudieren más que tú, yo te daré ayuda.
La segunda suerte salió por Simeón, por la tribu de los hijos de Simeón conforme a sus familias; y su heredad fue entre la heredad de los hijos de Judá.
De la tribu de Simeón, doce mil señalados. De la tribu de Leví, doce mil señalados. De la tribu de Isacar, doce mil señalados.
Y fue Judá a su hermano Simeón, e hirieron al cananeo que habitaba en Sefat, y la asolaron; y pusieron por nombre a la ciudad, Horma.
Y el SEÑOR respondió: Judá subirá; he aquí que yo he entregado la tierra en sus manos.
Y subió Judá, y el SEÑOR entregó en sus manos al cananeo y al ferezeo; y de ellos hirieron en Bezec a diez mil hombres.