Mas como sus hermanos hubieron subido, entonces él también subió al día de la Fiesta, no manifiestamente, sino como en cubierto.
SEÑOR, la habitación de tu Casa he amado, y el lugar del tabernáculo de tu gloria.
El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado; y tu ley está en medio de mis entrañas.
Por tanto, el prudente en tal tiempo calla, porque el tiempo es malo.
He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed pues prudentes como serpientes, y inocentes como palomas.
Y estando él aún hablando a la multitud, he aquí su madre y sus hermanos estaban fuera, que le querían hablar.
Pero respondiendo Jesús le dijo: Deja ahora; porque así nos conviene cumplir toda justicia. Entonces le dejó.
Cuando lo oyeron los suyos, vinieron para prenderle; porque decían: Está fuera de sí.
De manera que Jesús ya no andaba manifiestamente entre los judíos; mas se fue de allí a la tierra que está junto al desierto, a una ciudad que se llama Efraín; y se estaba allí con sus discípulos.
Y le dijeron sus hermanos: Pásate de aquí, y vete a Judea, para que tus discípulos también vean las obras que haces.
Porque ni aun sus hermanos creían en él.
Y habiéndoles dicho esto, permaneció en Galilea.
Mas venido el cumplimiento del tiempo, Dios envió su Hijo, nacido de mujer, nacido súbdito de la ley,