Y ofreció Salomón sacrificios pacíficos, los cuales sacrificó al SEÑOR, que fueron veintidós mil bueyes, y ciento veinte mil ovejas. Así dedicaron el rey y todos los hijos de Israel la Casa del SEÑOR.
Y los hijos de Israel, los sacerdotes y los levitas, y los demás que habían venido de la transportación, hicieron la dedicación de esta Casa de Dios con gozo.