Por tanto, el varón dejará a su padre y a su madre, y se allegará a su mujer, y serán por una carne.
Y tomó para sí Lamec dos mujeres: el nombre de la una fue Ada, y el nombre de la otra Zila.
Oye, hija, y mira, e inclina tu oído; y olvida tu pueblo, y la casa de tu padre;
La mujer virtuosa es corona de su marido; mas la mala, como carcoma en sus huesos.
que desampara el príncipe de su juventud, y se olvida del pacto de su Dios.
Alef Mujer valiente, ¿quién la hallará? Porque su valor pasa largamente a la de piedras preciosas.
El cual, cuando llegó, y vio la gracia de Dios, se regocijó; y exhortó a todos a que permaneciesen en su propósito del corazón en el Señor.
Porque la mujer que es sujeta a marido, mientras el marido vive está obligada a la ley; mas muerto el marido, ella es libre de la ley del marido.
Al SEÑOR tu Dios temerás, a él servirás, a él te allegarás, y por su nombre jurarás.
Mas vosotros que os allegasteis al SEÑOR vuestro Dios, todos estáis vivos hoy.
Quiero pues, que las que son jóvenes se casen, críen hijos, gobiernen la casa; que ninguna ocasión den al adversario para maldecir.
Mas al SEÑOR vuestro Dios os allegaréis, como habéis hecho hasta hoy;
También tomó David a Ahinoam de Jezreel, y ambas fueron sus mujeres.