Y meterás la mesa, y la pondrás en orden: meterás también el candelero y encenderás sus lámparas.
Y tú mandarás a los hijos de Israel que te traigan aceite de olivas, claro, molido, para la luminaria, para hacer arder continuamente las lámparas.
Cada día de sábado lo pondrá en orden delante del SEÑOR siempre; pacto sempiterno de los hijos de Israel.