Entonces fue Tamar a casa de su hermano Amnón, el cual estaba acostado; y tomó harina, y amasó e hizo hojuelas delante de él, y las aderezó.
Y David envió a Tamar a su casa, diciendo: Ve ahora a casa de Amnón tu hermano, y hazle de comer.
Tomó luego la sartén, y las sacó delante de él; mas él no quiso comer. Y dijo Amnón: Echad fuera de aquí a todos. Y todos se salieron de allí.
Maldito el que se echare con su hermana, hija de su padre, o hija de su madre. Y dirá todo el pueblo: Amén.
Y aquella mujer tenía en su casa un ternero grueso, el cual mató luego; y tomó harina y la amasó, y coció de ella panes sin levadura.