¿Comenzamos otra vez a alabarnos a nosotros mismos? ¿O tenemos necesidad, como algunos, de letras de recomendación para vosotros, o de recomendación de vosotros para otros ?
Y queriendo él pasar a Acaya, los hermanos exhortados, escribieron a los discípulos que le recibiesen; y venido él, aprovechó mucho por la gracia a los que habían creído;
Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como sabio maestro de obra, puse el fundamento, mas otro prosigue el edificio, pero cada uno vea cómo prosigue el edificio.
Porque no osamos entremeternos o compararnos con algunos que se encomiendan a sí mismos; mas no entienden que ellos, consigo mismos se miden, y a sí mismos se comparan.
He sido loco (en gloriarme); vosotros me constreñisteis; pues yo había de ser alabado de vosotros, porque en nada he sido menos que los grandiosos apóstoles, aunque nada soy.
No nos encomendamos pues otra vez a vosotros, sino os damos ocasión de gloriaros por nosotros, para que tengáis qué responder contra los que se glorían en las apariencias, y no en el corazón.