Tomó el óleo de la unción y la sangre que estaba sobre el altar y roció a Aarón y sus vestiduras, a los hijos de Aarón y sus vestiduras. As consagró a Aarón y sus vestiduras, a los hijos de Aarón y sus vestiduras.
En efecto, la ley instituye sacerdotes a hombres frágiles, mientras que la palabra de aquel juramento, posterior a la ley, instituye sacerdote al Hijo para siempre perfecto.
y los ungirás de la misma manera que ungiste a su padre, para que sean mis sacerdotes. Y su unción les conferirá el sacerdocio perpetuo de generación en generación'.
Nadab y Abihú murieron ante Yahveh, en el desierto del Sina, al presentar ante Yahveh un fuego profano, y no dejaron hijos. Eleazar e Itamar ejercieron el sacerdocio a las órdenes de Aarón, su padre.