Tengo, además, otras ovejas que no son de este redil: también a ellas tengo que conducirlas; ellas oirán mi voz, y habrá un solo reba o, un solo pastor.
Entonces le dijo Pilato: '¿Conque tú eres rey?'. Respondió Jesús: 'S, soy rey. Para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para ser testigo de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi voz'.
fija nuestra mirada en el jefe iniciador y consumador de la fe: Jesús. El cual, a la vista de la dicha que se le presentaba, soportó la cruz, sin tomar en cuenta la ignominia, y está sentado a la diestra del trono de Dios.
Es el novio el que tiene a la novia; pero el amigo del novio, que está con él y lo oye, se llena de alegr a al o r su voz. Pues bien, esta alegr a m a se ha cumplido ya.
Si, pues, Cristo ha padecido en carne, armaos también vosotros de la misma idea, a saber, que el que ha padecido en la carne ha quedado desligado del pecado,
Yo dorm a, pero mi corazón velaba. ¡Una voz! Mi amado llama: '¡Ábreme, hermana, amada m a, mi paloma sin mancha; mi cabeza rezuma de roc o; mis bucles, de las gotas de la noche'.