x

Biblia Todo Logo
idiomas
Bíblia Paralela


Salmos 86 - Biblia de las Americas 1997 Vs. Biblia de las Americas 1997

«

×

Salmos 86

SALMO 86Oración de David.

Salmo de súplica y confianza

1 Inclina, oh Señor, tu oído y respóndeme, porque estoy afligido y necesitado.

2 Guarda mi alma, pues soy piadoso; tú eres mi Dios; salva a tu siervo que en ti confía.

3 Ten piedad de mí, oh Señor, porque a ti clamo todo el día.

4 Alegra el alma de tu siervo, porque a ti, oh Señor, elevo mi alma.

5 Pues tú, Señor, eres bueno y perdonador, abundante en misericordia para con todos los que te invocan.

6 Escucha, oh Señor, mi oración, y atiende a la voz de mis súplicas.

7 En el día de la angustia te invocaré, porque tú me responderás.

8 No hay nadie como tú entre los dioses, oh Señor, ni hay obras como las tuyas.

9 Todas las naciones que tú has hecho vendrán y adorarán delante de ti, Señor, y glorificarán tu nombre.

10 Porque tú eres grande y haces maravillas; solo tú eres Dios.

11 Enséñame, oh Señor, tu camino; andaré en tu verdad; unifica mi corazón para que tema tu nombre.

12 Te daré gracias, Señor mi Dios, con todo mi corazón, y glorificaré tu nombre para siempre.

13 Porque grande es tu misericordia para conmigo, y has librado mi alma de las profundidades del Seol.

14 Oh Dios, los arrogantes se han levantado contra mí, y una banda de violentos ha buscado mi vida, y no te han tenido en cuenta.

15 Mas tú, Señor, eres un Dios compasivo y lleno de piedad, lento para la ira y abundante en misericordia y fidelidad.

16 Vuélvete hacia mí, y tenme piedad; da tu poder a tu siervo, y salva al hijo de tu sierva.

17 Muéstrame una señal de bondad, para que la vean los que me aborrecen y se avergüencen, porque tú, oh Señor, me has ayudado y consolado.

×

Salmos 86

SALMO 86Oración de David.

Salmo de súplica y confianza

1 Inclina, oh Señor, tu oído y respóndeme, porque estoy afligido y necesitado.

2 Guarda mi alma, pues soy piadoso; tú eres mi Dios; salva a tu siervo que en ti confía.

3 Ten piedad de mí, oh Señor, porque a ti clamo todo el día.

4 Alegra el alma de tu siervo, porque a ti, oh Señor, elevo mi alma.

5 Pues tú, Señor, eres bueno y perdonador, abundante en misericordia para con todos los que te invocan.

6 Escucha, oh Señor, mi oración, y atiende a la voz de mis súplicas.

7 En el día de la angustia te invocaré, porque tú me responderás.

8 No hay nadie como tú entre los dioses, oh Señor, ni hay obras como las tuyas.

9 Todas las naciones que tú has hecho vendrán y adorarán delante de ti, Señor, y glorificarán tu nombre.

10 Porque tú eres grande y haces maravillas; solo tú eres Dios.

11 Enséñame, oh Señor, tu camino; andaré en tu verdad; unifica mi corazón para que tema tu nombre.

12 Te daré gracias, Señor mi Dios, con todo mi corazón, y glorificaré tu nombre para siempre.

13 Porque grande es tu misericordia para conmigo, y has librado mi alma de las profundidades del Seol.

14 Oh Dios, los arrogantes se han levantado contra mí, y una banda de violentos ha buscado mi vida, y no te han tenido en cuenta.

15 Mas tú, Señor, eres un Dios compasivo y lleno de piedad, lento para la ira y abundante en misericordia y fidelidad.

16 Vuélvete hacia mí, y tenme piedad; da tu poder a tu siervo, y salva al hijo de tu sierva.

17 Muéstrame una señal de bondad, para que la vean los que me aborrecen y se avergüencen, porque tú, oh Señor, me has ayudado y consolado.

»

La Biblia de las América

Copyright (c) 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation

La Biblia de las América

Copyright (c) 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation

Siga-nos em:



Anúncios