Jueces 20:5 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual
5 Esa misma noche, unos hombres de la ciudad vinieron para atacarme y rodearon la casa donde estábamos hospedados. Pensaban matarme a mí, pero en vez de eso maltrataron a mi mujer hasta matarla.
5 Y levantándose contra mí los de Gabaa, rodearon contra mí la casa por la noche, con idea de matarme, y a mi concubina la humillaron de tal manera que murió.
5 Esa noche, algunos de los ciudadanos prominentes de Guibeá rodearon la casa con la intención de matarme, y violaron a mi concubina hasta que quedó muerta.
5 y los vecinos de Guibea decidieron hacerme daño. Durante toda la noche rodearon la casa donde yo estaba con la intención de matarme; violaron a mi concubina de tal manera que ella murió.
5 y los hombres de Gabaa se alzaron contra mí y cercaron la casa de noche, con intención de matarme, y humillaron a mi concubina de tal manera que murió.
5 y se alzaron contra mí los príncipes de Guibeá, rodearon la casa durante la noche con intención de asesinarme y tanto violaron a mi concubina que murió.
Estaban pasando un rato agradable cuando, de pronto, unos hombres de la ciudad rodearon la casa y empezaron a golpear violentamente la puerta. Eran unos hombres malvados, los cuales le gritaron al dueño de la casa: —¡Qué salga el hombre que está de visita en tu casa! ¡Queremos tener relaciones sexuales con él!
los hombres de la ciudad deberán sacarla de la casa de sus padres, y allí mismo la matarán a pedradas. Eso es lo que se merece quien comete una maldad así en Israel, y hace pasar a su familia semejante vergüenza. Si hacen esto, harán que la maldad desaparezca de su país.
así que el hombre, el esposo de la mujer asesinada, les dijo: —Llegué con mi mujer a la ciudad de Guibeá, que es de la tribu de Benjamín, para dormir allí.
»No hagan nada de esto, o de lo contrario, se volverán impuros. Los pueblos que ahora voy a expulsar del territorio que les voy a dar, han cometido todas estas maldades, y tanto ellos como el territorio se han vuelto impuros. Pero ni ustedes ni los extranjeros que vivan en su país deberán comportarse tan mal.
Y el hombre que yo señale será el que tiene lo que se debía destruir. Quémenlo vivo, junto con su familia y todo lo que posee, por no haber cumplido con el trato hecho con nuestro Dios. Lo que ha hecho es una vergüenza para Israel”.