Biblia Todo Logo
အွန်လိုင်း သမ္မာကျမ်းစာ

- ကြော်ငြာတွေ -





Amós 7:14 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

14 Yo le respondí: —Pues fíjate que no soy ningún profeta, ni tampoco mi padre lo fue. Me gano la vida cuidando ganado y cosechando higos silvestres.

အခန်းကိုကြည့်ပါ။ ကော်ပီ


နောက်ထပ်ဗားရှင်းများ

Biblia Reina Valera 1960

14 Entonces respondió Amós, y dijo a Amasías: No soy profeta, ni soy hijo de profeta, sino que soy boyero, y recojo higos silvestres.

အခန်းကိုကြည့်ပါ။ ကော်ပီ

Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Pero Amós contestó: —No soy profeta profesional ni fui entrenado para serlo. No soy más que un pastor de ovejas y cultivador de las higueras sicómoros.

အခန်းကိုကြည့်ပါ။ ကော်ပီ

Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Amós le replicó: 'Yo no soy profeta ni uno de los hermanos profetas; soy cuidador de rebaños y trato los sicómoros.

အခန်းကိုကြည့်ပါ။ ကော်ပီ

La Biblia Textual 3a Edicion

14 Pero Amós respondió a Amasías diciendo: No soy profeta ni hijo de profeta, sino boyero y cultivador de sicómoros,

အခန်းကိုကြည့်ပါ။ ကော်ပီ

Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Amós respondió así a Amasías: 'Yo no era profeta, ni hijo de profeta, sino ganadero y cultivador de sicómoros.

အခန်းကိုကြည့်ပါ။ ကော်ပီ




Amós 7:14
17 ပူးပေါင်းရင်းမြစ်များ  

En el pueblo de Tecoa vivía un ganadero llamado Amós, que comunicó a los israelitas varios mensajes de parte de Dios. Esto sucedió dos años antes del terremoto, cuando Ozías era rey de Judá y Jeroboam hijo de Joás era rey de Israel.


Después de esto, Eliseo volvió a Guilgal. Por esa época no había qué comer en la región, y todos pasaban hambre. Un día, Eliseo estaba sentado con los profetas, y le dijo a su sirviente: «Prepara en la olla grande un guiso».


Los profetas que vivían en Jericó fueron a ver a Eliseo y le preguntaron: —¿Ya sabes que Dios va a quitarte a tu maestro hoy? Él contestó: —Sí, ya lo sé, pero no digan nada.


Entonces el profeta Jehú hijo de Hananí, salió a recibirlo y le reclamó: «¿Por qué ayudaste a un malvado, y te hiciste amigo de gente que odia a Dios? Dios está muy enojado contigo.


Los profetas que estaban en Betel salieron a ver a Eliseo y le preguntaron: —¿Ya sabes que hoy Dios se va a llevar a tu maestro? Él les contestó: —Sí, ya lo sé, pero no digan nada.


Y aunque la gente de este mundo piensa que ustedes son tontos y no tienen importancia, Dios los eligió, para que los que se creen sabios entiendan que no saben nada. Dios eligió a los que, desde el punto de vista humano, son débiles, despreciables y de poca importancia, para que los que se creen muy importantes se den cuenta de que en realidad no lo son. Así, Dios ha demostrado que, en realidad, esa gente no vale nada.


A pesar de que Ocozías, rey de Israel, era un hombre malvado, Josafat también se unió a él, y juntos construyeron barcos en el puerto de Esión-guéber, para enviarlos a Tarsis. Fue entonces cuando Eliézer hijo de Dodavahu, de la ciudad de Maresá, le dio a Josafat este mensaje de parte de Dios: «A Dios no le agradó que te unieras a Ocozías, y por eso destruirá los barcos que has construido». Y así sucedió; los barcos se hundieron y no pudieron partir hacia Tarsis. La historia de Josafat, de principio a fin, está escrita en «Las historias de Jehú hijo de Hananí», que son parte del libro de la historia de los reyes de Israel.


Pero en esos días el profeta Hananí fue a hablar con Asá, rey de Judá, y lo reprendió así: «Nuestro Dios vigila todo el mundo, y siempre está dispuesto a ayudar a quienes lo obedecen y confían en él. Acuérdate de que, gracias a tu confianza en Dios, pudiste derrotar a los etíopes y a los libios, a pesar de que ellos tenían un ejército mucho más poderoso que el tuyo. »Sin embargo, ahora pusiste tu confianza en el rey de Siria y no en tu Dios; por eso, nunca podrás vencer al ejército sirio. Fuiste muy tonto, y ahora vivirás en guerra toda tu vida».


Un día, los profetas le dijeron a Eliseo: —Mira, el lugar donde vivimos contigo es demasiado pequeño para nosotros.


y se detuvieron a la orilla del río Jordán. Cincuenta profetas los habían seguido, pero permanecieron a cierta distancia de ellos.


Después, un hombre que pertenecía al grupo de los profetas de Dios le dijo a uno de sus compañeros: —Dios ordena que me hieras. Por favor, hazlo. Pero su compañero no quiso herirlo.


La gente que lo conocía y lo veía profetizar en compañía de aquellos profetas, empezó a decir: «¿Qué le pasa al hijo de Quis? ¿Y esos profetas de dónde salieron? ¿Hasta Saúl es profeta?» Así fue como nació el dicho: «¡Hasta Saúl es profeta!»


Elías se fue de allí y encontró a Eliseo hijo de Safat. Eliseo estaba arando su tierra con doce pares de bueyes. Él iba guiando la última pareja de bueyes. Cuando Eliseo pasó por donde estaba Elías, este le puso su capa encima a Eliseo, y de esta manera le indicó que él sería profeta en lugar de él.


Cuando los profetas de la ciudad de Jericó vieron a Eliseo al otro lado del río, dijeron: «Ahora Eliseo es el sucesor de Elías». Entonces fueron a su encuentro, se inclinaron delante de él en señal de respeto,


¡Andan entre los matorrales, juntando hierbas amargas y comiendo solo raíces!


Si el león ruge, todo el mundo tiembla de miedo. Si nuestro Dios habla, todo profeta tiene que hablar.


ကြှနျုပျတို့နောကျလိုကျပါ:

ကြော်ငြာတွေ


ကြော်ငြာတွေ