2 Samuel 22:48 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

⁴⁸ ¡Tú me permitiste vengarme de mis enemigos! ¡Tú pusiste a los pueblos bajo mi dominio!

နောက်ထပ်ဗားရှင်းများ

Biblia Reina Valera 1960

⁴⁸ El Dios que venga mis agravios, Y sujeta pueblos debajo de mí;

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴⁸ Él es el Dios que da su merecido a los que me dañan; él derriba a las naciones y las pone bajo mi control,

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴⁸ ¡Oh Dios, me concedes el desquite, y colocas los pueblos a mis pies!

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴⁸ El Dios que venga mis agravios, Y sujeta pueblos debajo de mí;

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴⁸ el Dios que me concede la venganza, y somete los pueblos a mi yugo.

2 Samuel 22:48 ပူးပေါင်းရင်းမြစ်များ

Salmos 144:2

¡Tú me amas y me cuidas! Eres mi escondite más alto, el escudo que me protege, ¡el Dios que me permite reinar sobre mi propio pueblo!

Salmos 94:1

Dios mío, tú eres el juez de la tierra; ¡hazte presente, entra en acción, y castiga a los culpables! ¡Dales su merecido a los orgullosos!

1 Corintios 15:25

Cristo reinará hasta que haya vencido a todos sus enemigos.

Salmos 110:1

1 (1b) Mi Dios le dijo a mi señor el rey: «Siéntate a la derecha de mi trono hasta que yo derrote a tus enemigos».

2 Samuel 18:31

En ese momento llegó el etíope y le dijo al rey: —¡Traigo a Su Majestad buenas noticias! ¡Dios ha castigado a los que se rebelaron contra usted!

2 Samuel 18:19

El sacerdote Ahimaas le dijo a Joab: —Déjeme ir ahora mismo a ver al rey. Quiero darle la noticia de que Dios lo ha librado de sus enemigos.

1 Samuel 25:39

Cuando David se enteró de que Nabal había muerto, dijo: «¡Bendito sea Dios, que castigó a Nabal! Se vengó por lo que me hizo, y no dejó que yo mismo lo castigara». Luego, David envió algunos de sus ayudantes a Carmel, para que le dijeran a Abigail: «David nos manda a pedirle que acepte usted ser su esposa».

1 Samuel 25:30

»Usted, mi señor, será el líder de Israel, pues Dios le cumplirá todas las promesas que le ha hecho.

2 Samuel 4:8

hasta llegar a Hebrón. Una vez allí, le llevaron a David la cabeza de Is-bóset y le dijeron: —Aquí tiene Su Majestad la cabeza de Is-bóset, hijo de su enemigo Saúl, que quería matarlo. Dios ya le ha dado a Saúl su merecido, pues todos sus hijos están muertos.