1 Samuel 20:26 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

²⁶ Saúl no dijo nada ese día porque pensó: «Tal vez David no vino por no haber cumplido con los ritos para purificarse».

နောက်ထပ်ဗားရှင်းများ

Biblia Reina Valera 1960

²⁶ Mas aquel día Saúl no dijo nada, porque se decía: Le habrá acontecido algo, y no está limpio; de seguro no está purificado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁶ Ese día Saúl no dijo nada acerca de ello, pero pensó: «Algo debe haber hecho que David quedara ceremonialmente impuro».

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁶ Ese día Saúl nada dijo pues pensó: 'No está puro, es algo que pasa. Seguramente no está puro'.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁶ Sin embargo, aquel día Saúl no dijo nada, porque pensó: Algo le ha sucedido y no está limpio; seguramente no se ha purificado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁶ Saúl no dijo nada aquel día, pues pensó: '¡Será casualidad! No estará puro, por no haber podido purificarse'.

1 Samuel 20:26 ပူးပေါင်းရင်းမြစ်များ

Levítico 11:27

»Todo animal que al caminar se apoye en las plantas de sus cuatro patas será considerado impuro. Si alguien toca o levanta su cadáver, quedará impuro hasta el anochecer, y deberá lavar sus ropas.

Levítico 11:24

Si alguien toca o levanta el cadáver de alguno de estos animales, quedará impuro hasta el anochecer, y deberá lavar sus ropas.

1 Samuel 16:5

Samuel les contestó: —Todo está bien. No pasa nada. Solo vine a presentarle a Dios esta ofrenda. Prepárense y vengan conmigo al culto. Samuel mismo preparó a Jesé y a sus hijos para que pudieran acompañarlo en el culto.

Levítico 11:40

Si alguien come carne de ese animal, quedará impuro hasta el anochecer y deberá lavar sus ropas. Si alguien levanta el cadáver del animal, quedará impuro hasta el anochecer y deberá también lavar sus ropas.

Levítico 11:31

Si alguien toca el cadáver de alguno de ellos, quedará impuro hasta el anochecer.

1 Samuel 20:27

Al día siguiente, que era el segundo día del mes, el lugar de David seguía vacío. Entonces Saúl le preguntó a su hijo Jonatán: —¿Por qué David no vino a comer ni ayer ni hoy?