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- sáálî...Enekuu -





Isaías 24:12 - La Biblia Textual 3a Edicion

12 En la ciudad sólo quedan escombros; Sus puertas han sido heridas con la ruina.

em-bólúnotó Nkera


Biblia Sinyati te nkutuk oo lmaasai naisiraki eng’ejuk enye enye

Biblia Reina Valera 1960

12 La ciudad quedó desolada, y con ruina fue derribada la puerta.

em-bólúnotó Nkera

Biblia Nueva Traducción Viviente

12 La ciudad ha quedado en ruinas, sus puertas echadas abajo.

em-bólúnotó Nkera

Biblia Católica (Latinoamericana)

12 La ciudad es ahora sólo ruinas y la plaza se ha quedado sin vida, desierta.)

em-bólúnotó Nkera

Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Sólo queda en la ciudad desolación; triturada está la puerta como escombrera.

em-bólúnotó Nkera

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

12 En la ciudad quedó desolación, y con destrucción fue herida la puerta.

em-bólúnotó Nkera




Isaías 24:12
12 Eitobir Enkop  

¿Cómo espera el bien la que habita en Marot, Si de parte de YHVH ha bajado el mal hasta la puerta de Jerusalem?


Porque su llaga° es incurable, y ésta alcanzará también a Judá, Se propagará hasta la puerta de mi pueblo, En medio de Jerusalem.


Porque el monte de Sión está desolado, Y las zorras se pasean por él.


f Ha hundido en el fango sus portales, ha roto y quebrado sus cerrojos. Su rey y sus príncipes están esparcidos entre los gentiles, no existe ley° Y sus profetas no hallan más visión de parte de YHVH.


d Las calzadas de Sión están de luto, nadie asiste a las solemnidades, Todas sus puertas están desoladas, sus sacerdotes gimen, Sus doncellas están afligidas, y ella misma está sumida en amargura.


a ¡Cómo ha quedado solitaria la ciudad populosa! ¡Cómo se convirtió en viuda la grande de las naciones! ¡La princesa de provincias se ha tornado tributaria!


Reduciré Jerusalem a montones de escombros, La convertiré en cubil de chacales, Y a las ciudades de Judá en desolación sin habitante.


El palacio quedará vacío, La ciudad populosa desierta, El collado y la atalaya, convertidos en baldíos para siempre, En delicia de asnos Y pastizal de rebaños.


Entonces el rey° se enfureció, y enviando sus ejércitos destruyó a aquellos homicidas y prendió fuego a su ciudad.°


¡Aúlla, puerta! ¡Grita, ciudad! ¡Desfallece, oh Filistea, toda tú! Porque un humo viene del norte, Y no hay rezagado en sus huestes.


Pero caerá granizo; El bosque será talado; La ciudad será totalmente abatida.


Yo iré delante de ti, y allanaré los lugares escabrosos,° Quebraré los batientes de bronce, y haré pedazos las barras de hierro.


O-osiaa:

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