x

Biblia Todo Logo
idiomas
La Biblia Online

«

Rut 3 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

1 Naomí su suegra le dijo: “Hija, tengo que buscar un hogar para ti, donde puedas ser feliz.

2 Ahora, ahí está nuestro pariente Bóaz, con cuyas criadas has estado. Mira, esta noche él va a estar aventando la cebada en la era.

3 Así que tú te bañas, te perfumas, te vistes y bajas a la era. Pero no te des a conocer al hombre hasta que él haya acabado de comer y de beber.

4 Cuando él se acueste, tú observas el lugar donde se acuesta, y vas y destapas un sitio a sus pies y te acuestas ahí. Él te va a decir lo que debes hacer”.

5 Ella le respondió: “Voy a hacer todo lo que me dices”.

6 Ella bajó a la era e hizo tal como su suegra le había indicado.

7 Bóaz comió y bebió, y con el ánimo contento se retiró a dormir al lado del montón de grano. Entonces ella fue sigilosamente, destapó un sitio a sus pies y se acostó.

8 A la media noche él se estremeció y se volteó –y vio a una mujer acostada a sus pies.

9 Entonces él le preguntó: “¿Quién eres tú?” Y ella respondió: “Soy Rut, su servidora. Extienda su manto sobre su servidora, porque usted es pariente redentor”.

10 Él exclamó: “Yahweh te bendiga, hija. Esta última acción tuya es mejor que la primera, porque no has ido tras los jóvenes, sean pobres o ricos.

11 Y ahora, hija, no temas. Yo haré por ti todo lo que tú pidas, pues todos los ancianos de mi pueblo saben que tú eres una mujer muy decente.

12 Pero, aunque es cierto que yo soy pariente redentor, hay otro pariente redentor más cercano que yo.

13 Pasa la noche. Luego cuando sea de día, si él actúa como redentor, está bien; que te redima. Pero si él no quiere actuar como redentor contigo, ¡por vida de Yahweh, que yo te redimiré! Acuéstate hasta la mañana.

14 Así durmió a sus pies hasta la mañana. Pero se levantó antes que una persona pudiese distinguir a otra, porque él pensó: “Que no se sepa que la mujer vino a la era”.

15 También le dijo: “Coge el manto que tienes encima y sosténlo”. Ella lo sostuvo, y él llenó seis medidas de cebada y se las puso encima. Cuando ella regresó al poblado,

16 fue donde su suegra, y ésta le preguntó: “¿Cómo te fue, hija?” Ella le contó todo lo que el hombre había hecho por ella:

17 y añadió: “Me dio estas seis medidas de cebada y me dijo: ‘Para que no vayas a tu suegra con las manos vacías.’”

18 Y Naomí dijo: “Quédate aquí, hija, hasta que sepas cómo resulta el asunto. Porque el hombre no va a descansar hasta que resuelva hoy mismo el asunto.

»
Versión Israelita Nazarena 2011

Traducción Kadosh Israelita Mesiánica © 2011 Diego Ascunce Traductor

Síguenos en:




Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos