Mateo 20 - La Biblia del Oso RV 1569 Declara el Señor por la parabola de los llamados a la viña en diuersas horas, loque dixo en la fin del cap. prec. asab. que no todos losque ſe pensarian ſer los primeros en la Igleſia à la fin quedarian en ella: ni todos losque otros pensauan que eſtauan fuera deella, à la fin quedarian fuera: porque la predicacion externa del Euangelio à muchos ſe communica, mas la elecion de Dios no à tantos. II. Llegando cerca de Ieruſalem declara à ſus Diſcipulos ſu muerte con las circũstancias deella, y ſu Resurrecion. III. Aocasion de la peticion de los hijos de Zebedeo por intercession de ſu madre, declara el Señor que las primacias en ſu Igleſia van àl reues de las del mundo, à ſaber, estas por dominar &c. las otras por seruir &c. IIII. Sana dos ciegos junto à Iericho. 1 Porque el Reyno de los cielos es semejante à vn hombre, padre de familia, que ſalió por la mañana à coger peones para ſu viña. 2 Y concertado con los peones por vn dinero àl dia, embiólos à ſu viña. 3 Y ſaliendo cerca de la hora de las tres, vido otros que eſtauan en la plaça ociosos: 4 Y dixoles, Id tambien vosotros à mi viña, y daroshé loque fuere juſto. 5 Y ellos fuerõ. Salió otra vez cerca de las seys, y delas nueue horas, y hizo lo mismo. 6 Y ſaliendo cerca de las onze horas, halló otros que eſtauan ociosos, y dixoles, Porque estays aqui todo el dia ociosos? 7 Dizenle ellos, Porque nadie nos ha cogido. Dizeles, Id tambien vosotros à la viña, y recibireys loque fuere juſto. 8 Y quando fue la tarde del dia, el señor de la viña dixo à ſu procurador, Llama los peones, y pâgales el jornal començando desde los postreros haſta los primeros. 9 Y viniendo los que auian venido cerca de las onze horas, recibieron cada vno vn dinero. 10 Y viniendo tambiẽ los primeros, pensaron que auian de recebir mas: mas tambien ellos recibieron cada vno vn dinero. 11 Y tomando lo murmurauan contra el padre de la familia. 12 Diziendo, Estos postreros han hecho vna hora, y has los hecho iguales à noſotros, que auemos lleuado la carga y el calor de dia. 13 Y el respõdiendo dixo à vno deellos, Amigo, no te hago agrauio. No te concertaste conmigo por vn dinero? 14 Toma lo que es tuyo, y vete: y quiero dar à eſte postrero como à ti. 15 No me es licito à mi hazer loque quiero en mi coſas? Es malo tu ojo, porque yo ſoy bueno? 16 Ansi los primeros serán postreros: y los postreros primeros: porque muchos ſon llamados, mas pocos escogidos. 17 ¶ Y subiendo Iesus à Ieruſalem, tomó ſus doze Diſcipulos à parte enel camino, y dixoles. 18 Heaqui subimos à Ieruſalẽ: y el Hijo del hombre ſerá entregado à los principes de los sacerdotes, y à los Escribas: y condenarlo han à muerte: 19 Y entregarlo han à las Gentes para que lo escarnezcan, y açoten, y crucifiquẽ: mas àl tercero dia ressuscitara. 20 Entonces llegóse à el la madre de los hijos de Zebedeo con ſus hijos, adorãdo, y pidiendole algo. 21 Y el le dixo, Que quieres? Ella le dixo, Di que ſe assienten estos dos hijos mios el vno à tu manderecha, y el otro à tu yzquierda en tu Reyno. 22 Entonces Iesus respondiendo, dixo, No sabeys lo que pedis, Podeys beuer el vaſo que yo tengo de beuer? y ſer baptizados del baptismo deque yo ſoy baptizado? Dizenle ellos Si. 23 El les dize, A la verdad mi vaſo beuereys: y del baptismo deque yosoy baptizado, sereys baptizados: mas sentaros à mi manderecha y à mi yz quierda, no es mio dar lo, ſino à losque eſtá aparejado de mi Padre. 24 ¶ Y como los diez oyeron eſto, enojaronſe de los dos hermanos. 25 Entonces Iesus llamandolos, dixo, Ya sabeys que los principes de las Gentes ſe enseñorean ſobre ellas: y losque ſon Grãdes, essecutan ſobre ellas potestad. 26 Mas entre vosotros no ſerá anſi: ſino elque quisiere entre vosotros hazerse grãde, ſerá vuestro seruidor; 27 Y elque quisiere entre vosotros ſer el primero, ſerá vuestro sieruo. 28 Como el Hijo del hobre no vino para sér seruido, ſino para seruir: y para dar ſu vida en rescate por muchos. 29 ¶ Entonces ſaliendo ellos de Iericho, seguiale gran compaña. 30 Y heaqui dos ciegos sentados junto àl camino, como oyeron que Iesus paſſaua, clamaron, diziẽdo, Señor, Hijo de Dauid, ten misericordia de noſotros. 31 Y la compaña les reñia que callaſſen: mas ellos clamauan mas, diziẽdo, Señor, Hijo de Dauid, ten misericordia de noſotros. 32 Y parandoſe Iesus, llamólos, y dixo, Que quereys que haga por vosotros? 33 Dizẽle ellos, Señor, que seã abiertos nuestros ojos. 34 Entonces Iesus, auiendo misericordia deellos tocó los ojos deellos, y luego ſus ojos recibieron la vista, y siguieronlo. |
Casiodoro de Reina © Versión de Dominio Público.