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Zacarías 6:1 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Volví a levantar los ojos y tuve una visión: vi cuatro carros que salían de entre dos montes. Los montes eran de bronce.

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Biblia Reina Valera 1960

1 De nuevo alcé mis ojos y miré, y he aquí cuatro carros que salían de entre dos montes; y aquellos montes eran de bronce.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Entonces levanté la mirada otra vez y vi cuatro carros de guerra que salían de entre dos montañas de bronce.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Tuve otra visión: cuatro carros salían de entre dos cerros y los cerros eran de bronce.

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La Biblia Textual 3a Edicion

1 Volví a alzar mis ojos y miré, y he aquí cuatro carros que salían de entre dos montes, y los montes eran montes de bronce.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

1 Y me volví, y alcé mis ojos y miré, y he aquí cuatro carros que salían de entre dos montañas; y aquellas montañas eran montañas de bronce.

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Zacarías 6:1
22 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

El cuerno roto y los cuatro cuernos que salieron en su lugar son cuatro reinos que surgirán de su nación, pero su poder será menor.


En él mismo hemos sido también agraciados con la herencia, predestinados -según el previo decreto del que lo impulsa todo conforme a la decisión de su voluntad-


para hacer lo que tu mano y tu designio tenía predeterminado que sucediera.


El ángel me respondió: 'Éstos son los que salen en dirección a los cuatro vientos del cielo después de haberse presentado al Señor de toda la tierra.


Alcé de nuevo mis ojos y tuve una visión: vi un libro que iba volando.


'Éste es el sueño que he tenido, yo, el rey Nabucodonosor. Tú, Baltasar, dame a conocer su sentido, ya que ninguno de los sabios de mi reino ha sido capaz de interpretarlo. Pero tú sí eres capaz, porque en ti reside la inspiración divina.'


y también desde hoy soy el mismo. No hay quien salve de mi mano: lo haré, y ¿quién lo cambiará?


No hay sabiduría, ni inteligencia, ni consejo que valga contra Yahveh.


Tus favores, Señor, alcanzan hasta el cielo y tu fidelidad hasta las nubes,


El consejo del Señor subsiste para siempre, sus designios, por todas las edades.


Si él calla, ¿quién condenará? Si encubre su rostro, ¿quién lo percibe? Él se preocupa de pueblos e individuos,


Él levanta al débil del polvo, y del estercolero saca al indigente, para hacerlo sentar entre los nobles, y para asignarle un trono de honor. Porque de Yahveh son las columnas de tierra, y asentó sobre ellas el orbe.


según el designio eterno que ha realizado en Cristo Jesús, nuestro Señor,


Entonces Eliseo se puso a orar y dijo: '¡Oh Yahveh! Ábrele los ojos para que vea'. Abrió Yahveh los ojos del criado, y éste vio que el monte estaba lleno de caballos y de carros de fuego que rodeaban a Eliseo.


Pues mirad que Yahveh avanza en el fuego y sus carros como el torbellino, para desfogar con furor su ira y su indignación con llamas de fuego.


Mirad: sube como las nubes, y sus carros como el huracán; sus caballos más ligeros que las águilas. ¡Ay de nosotros, pues estamos perdidos!


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