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Zacarías 3:9 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 He aquí la piedra que pongo delante de Josué: sobre esta única piedra hay siete ojos. Mirad que yo mismo grabaré su inscripción -oráculo de Yahveh Sebaot- y quitaré la iniquidad de este país en un solo día.

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Biblia Reina Valera 1960

9 Porque he aquí aquella piedra que puse delante de Josué; sobre esta única piedra hay siete ojos; he aquí yo grabaré su escultura, dice Jehová de los ejércitos, y quitaré el pecado de la tierra en un día.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Miren ahora la joya que he puesto ante Jesúa, una sola piedra con siete facetas. Grabaré una inscripción en ella, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales, y en un solo día quitaré los pecados de esta tierra.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Pues pongo ahora delante de Josué una piedra que reluce como si tuviera siete ojos y yo mismo escribo en ella la inscripción. y cancelo la deuda del país en un solo día.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 He aquí pongo una piedra delante de Josué: Es una Piedra Única en la cual hay siete ojos; y Yo mismo esculpiré su inscripción: QUITARÉ EL PECADO DE LA TIERRA EN UN DÍA. Oráculo de YHVH Sebaot.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

9 Porque he aquí aquella piedra que puse delante de Josué; sobre esta única piedra hay siete ojos; he aquí, yo grabaré su escultura, dice Jehová de los ejércitos, y quitaré el pecado de la tierra en un día.

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Zacarías 3:9
34 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Porque los que despreciaron el día de los modestos comienzos, se alegrarán cuando vean la piedra de remate en manos de Zorobabel. Estas siete lámparas son los ojos de Yahveh que recorren toda la tierra


En aquellos días y en aquel tiempo -oráculo de Yahveh-, se buscará la culpa de Israel y no la habrá, y los pecados de Judá y no se hallarán, porque perdonaré al resto que yo deje.


Y vi en medio del trono y de los cuatro seres vivientes, y en medio de los ancianos, a un Cordero en pie, como degollado. Tenía siete cuernos y siete ojos, que son los siete espíritus de Dios que recorren toda la tierra.


Por eso, así dice el Señor Yahveh: 'Mirad que estoy cimentando en Sión una piedra, una piedra probada, angular, preciosa, fundamental, cimentada: quien se apoye en ella no vacilará.


La piedra que el cantero desechaba, se ha tornado en remate de la esquina.


según está escrito: He aquí que pongo en Sión una piedra de tropiezo y una roca contra la cual uno se da; pero quien tiene fe en él no quedará defraudado.


No tendrá ya que enseñarse uno a otro ni una persona a otra persona, diciendo: 'Conoced a Yahveh', porque todos ellos me conocerán, desde el más pequeño al más grande -oráculo de Yahveh-, cuando perdone su culpa y no recuerde más su pecado'.


Él no necesita, como los sumos sacerdotes, ofrecer sacrificios, cada día, primero por los pecados propios y después por los del pueblo. Porque esto lo hizo de una vez para siempre ofreciéndose a sí mismo.


Sin embargo, el sólido cimiento de Dios permanece firme y tiene sellada esta inscripción: El Señor conoce a los suyos; y esta otra: apártese de la maldad todo el que invoca el nombre del Señor.


nos marcó con su sello y puso en nuestros corazones la fianza del Espíritu.


Él es sacrificio de purificación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.


Es evidente que sois una carta de Cristo, redactada por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu de Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en las tablas de carne de los corazones.


Ésta es la piedra despreciada por vosotros, los constructores de la casa, y, no obstante, constituida en remate de la esquina.


No trabajéis por conseguir el alimento perecedero, sino el que permanece para vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre, porque éste es el que el Padre, Dios, ha marcado con su sello'.


Al día siguiente, Juan ve a Jesús que viene hacia él, y entonces dice: 'Éste es el Cordero de Dios, el que quita el pecado del mundo.


'Aquel día habrá una fuente abierta para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén contra el pecado y la impureza.


Éste, tomando la palabra, habló así a los que estaban ante él: 'Quitadle las ropas sucias'. Y a él le dijo: 'Mira: te he quitado tu iniquidad'. Y añadió: 'Vestidle vestiduras festivas


Porque los ojos de Yahveh recorren toda la tierra para fortalecer a los que se le entregan con entero corazón. Neciamente has procedido esta vez. Por eso desde ahora habrá guerras contra ti'.


'Harás una lámina de oro puro, y grabarás en ella como se graba en los sellos: 'Consagrado a Yahveh'.


Las piedras corresponden a los nombres de las tribus de Israel. Serán, pues, doce, según sus nombres, y estarán grabadas como los sellos, cada una con el nombre de una de las doce tribus.


Harás que graben estas dos piedras con los nombres de las tribus de Israel al modo como el lapidario graba un sello, y las engastarás en engastes de oro.


Cuanto dista el oriente del ocaso, así aleja él de nosotros nuestras culpas.


Ahora, mi señor el rey, los ojos de todo Israel están pendientes de ti, esperando que les declares quién se ha de sentar en el trono de mi señor el rey, después de él.


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