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Salmos 97:3 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Fuego va delante de él, para abrasar, en torno, a su enemigo.

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Biblia Reina Valera 1960

3 Fuego irá delante de él, Y abrasará a sus enemigos alrededor.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Fuego se extiende delante de él y calcina a todos sus enemigos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Va avanzando un fuego delante de él, que alrededor devora a sus contrarios.

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La Biblia Textual 3a Edicion

3 Un fuego avanza delante de Él, Que abrasa a sus adversarios en derredor.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

3 Fuego va delante de Él, y quema a sus enemigos alrededor.

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Salmos 97:3
19 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

nuestro Dios viene y no calla. Le precede un fuego devorante, y en su entorno, la tempestad en furia.


La tierra treme toda y se perturba, las bases de los montes se estremecen y palpitan, a causa de su ira.


pues ciertamente nuestro Dios es un fuego devorador.


en medio de un fuego flameante, para hacer justicia con los que no han reconocido a Dios y no han aceptado el evangelio de nuestro Señor Jesús.


Un río de fuego corría, fluía delante de él. Miles de millares le servían, miríadas de miríadas le obedecían. Se sentó el tribunal y se abrieron los libros.


Porque fuego ardiente se enciende en mi rostro, que quema hasta el seol más profundo; que devora la tierra y sus productos, que abrasa los cimientos de los montes.


La peste le precede, le sigue la fiebre.


Si alguien pretende causarles mal, saldrá fuego de la boca que devorará a sus enemigos. Si alguien pretende causarles mal, morirá sin remedio.


Cara a cara os habló Yahveh en el monte, de en medio del fuego.


Desde lo alto del cielo te hizo oír su voz para instruirte, y sobre la tierra te hizo ver su gran fuego, y de en medio del fuego oíste sus palabras.


Os acercasteis y estuvisteis al pie de la montaña. La montaña, envuelta en tinieblas, nubes y densa oscuridad, ardía en llamas que llegaban hasta el cielo.


Y cuantos no se hallaron inscritos en el libro de la vida fueron precipitados en el lago de fuego.


De su nariz exhala humo, de su boca, un fuego que devora, todo él carbones encendidos.


Miré: y he aquí que un viento huracanado venía del norte, una nube grande, con fuego que relampagueaba continuamente y claridad alrededor, y dentro de él como el centelleo del bronce en medio del fuego.


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