Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Salmos 74:19 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

19 No entregues a las bestias a quienes te bendicen, ni olvides para siempre la vida de tus pobres.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

19 No entregues a las fieras el alma de tu tórtola, Y no olvides para siempre la congregación de tus afligidos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

19 No permitas que estas bestias salvajes destruyan a tus tórtolas; no te olvides para siempre de tu pueblo dolido.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

19 No entregues a las fieras el alma que te da gracias, no olvides para siempre la vida de tus pobres.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

19 No entregues el alma de tu tórtola a las bestias salvajes, No te olvides para siempre de la congregación de tus afligidos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

19 No entregues a las bestias el alma de tu tórtola; y no olvides para siempre la congregación de tus afligidos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Salmos 74:19
12 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Paloma mía que anidas en las grietas de la roca, en los huecos escarpados, déjame ver tu figura, hazme sentir tu voz; que tu voz es suave, tu figura, graciosa.


Mirad que os envío como ovejas en medio de lobos; sed, por tanto, cautelosos como serpientes y sencillos como palomas.


Yod. Los malvados retornan al seol, y así todos los pueblos que se olvidan de Dios.


Dejaré en medio de ti un pueblo pobre y humilde que buscará refugio en el nombre de Yahveh.


¿Quiénes son ésos que vuelan como nube, y como palomas a sus palomares?


¡Qué bella eres, amada mía, qué hermosa eres! Tus ojos son palomas, a través de tu velo. Tus cabellos, como un hato de cabras ondulando en el monte Galaad.


a fin de que gobierne tu pueblo en equidad y a tus humildes rectamente.


Huyen, huyen los jefes del ejército, y la bella de la casa se reparte el botín,


Una lluvia generosa hiciste, Dios, caer, a tu heredad rendida prestaste fortaleza.


Pero una es mi paloma, mi perfecta, la única de su madre, la preferida de la que la alumbró. Al verla, las doncellas la agasajan, las reinas y las esposas la celebran.


Qof. Levántate, Yahveh, eleva, Dios, tu mano.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម