Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Salmos 6:2 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Ah Señor, no me corrijas en tu enojo y en tu furor no me reprendas.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

2 Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; Sáname, oh Jehová, porque mis huesos se estremecen.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Ten compasión de mí, Señor, porque soy débil; sáname, Señor, porque mis huesos agonizan.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Ten compasión de mí que estoy sin fuerzas; sáname pues no puedo sostenerme.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

2 ¡Ten piedad de mí, oh YHVH, porque desfallezco! Sáname, oh YHVH, porque mis huesos se estremecen,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy debilitado; sáname, oh Jehová, porque mis huesos están conmovidos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Salmos 6:2
21 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Venid, volvamos a Yahveh: él nos desgarró, pero él nos curará; él nos hirió, pero él nos vendará.


Apiádate, Señor, que sufro angustia, mis ojos se consumen de pesar y mi alma y mis entrañas.


Yo te ensalzo, Señor, pues tú me libras y no das a mi enemigo alegría sobre mí.


Sáname, Yahveh, y sanaré; sálvame y me salvaré, pues mi alabanza eres tú.


Tú quieres la verdad en lo profundo y me enseñas saber, en lo secreto.


Ved, pues, ahora que yo, yo soy, y que no hay otro dios a mi lado. Yo doy muerte y doy vida, yo hiero y yo curo, no hay quien libre de mi mano.


Voy apocado, hasta el extremo decaído, ando sombrío todo el día.


Tus flechas han caído sobre mí y se ha bajado contra mí tu mano.


Mientras quise callar, mis huesos se gastaban en llanto todo el día;


Rogó Abrahán a Dios; y Dios sanó a Abimélec, a su mujer y a sus siervas, para que pudieran tener hijos;


Su fama se extendió por toda Siria. Le traían a todos los que se sentían mal, aquejados de diversas enfermedades y dolores: endemoniados, epilépticos y paralíticos; y él los curaba.


hacia mí abren sus fauces, como león que ruge y que devora.


porque él hiere y venda la herida, golpea y cura con sus manos.


Moisés clamó a Yahveh diciéndole: '¡Oh Dios!, por favor, cúrala'.


Y dijo: 'Si escuchas de veras la voz de Yahveh, tu Dios, y haces lo que es recto a sus ojos; si prestas oído a sus mandatos y si guardas todas sus leyes, no te enviaré ninguna de las enfermedades con que he afligido a Egipto, porque yo soy Yahveh, el que te sana'.


¡Piedad, piedad de mí, vosotros mis amigos, porque me ha herido la mano de Dios!


Ah Señor, no me acuses en tu ira y en tu furor no me reprendas.


Castígame, Señor, pero con medida, no según tu ira, pues sería aniquilado.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម