Salmos 119:95 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁹⁵ Para ruina me acechan los malvados, mas yo prosigo absorto en tus avisos.

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Biblia Reina Valera 1960

⁹⁵ Los impíos me han aguardado para destruirme; Mas yo consideraré tus testimonios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁹⁵ Aunque los malvados se escondan por el camino para matarme, con calma, mantendré mi mente puesta en tus leyes.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁹⁵ Los malvados me espían para perderme, pero estoy atento a tus testimonios.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁹⁵ Acéchanme los malos para destruirme, Pero yo consideraré tus testimonios.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁹⁵ Los impíos me han aguardado para destruirme; mas yo consideraré tus testimonios.

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Salmos 119:167

Tus avisos yo los guardo y les tengo gran amor.

Salmos 119:31

yo me apego a tu enseñanza: no permitas, Señor, que me avergüence.

Salmos 119:69

Los soberbios me embarran de mentiras, mas yo guardo tus leyes con amor,

Hechos 25:3

pidiéndoselo como un favor, que enviara a Pablo a Jerusalén, a la par que tramaban una emboscada para deshacerse de él durante el viaje.

Hechos 23:21

Pero tú no les hagas caso, porque preparan contra él una emboscada más de cuarenta hombres de entre ellos, que se han juramentado a no comer ni beber hasta que le hayan dado muerte, y ahora están preparados en espera de tu asentimiento'.

Hechos 12:11

Vuelto en sí Pedro, dijo: 'Ahora realmente caigo en la cuenta de que ha enviado el Señor su ángel y me ha librado de la mano de Herodes y de toda la expectación del pueblo judío'.

Salmos 119:129

Pe. Tus testimonios son maravillosos, por eso yo los guardo;

Salmos 119:125

Yo soy tu servidor: dame sentido y que pueda gustar tus testimonios.

Salmos 119:61

Los lazos del impío me rodean, mas de tu ley yo no me olvido.

Salmos 119:24

yo tengo en tus avisos mis delicias, y ellos son mis consejeros.

Salmos 38:12

Amigos y vecinos se apartan de mi plaga, mis parientes se tienen a distancia.

Salmos 37:32

Sade. Al acecho del justo está el impío, buscando cómo pueda darle muerte;

Salmos 27:2

Al acercarse a mí los malhechores para comer mi carne, son ellos, mis opresores y enemigos, los que tropiezan y se caen.

Salmos 119:111

Mi heredad serán por siempre tus avisos, ellos son la alegría de mi alma.