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Salmos 1:2 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 sino que en la ley divina se complace y sobre ella medita, día y noche.

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Biblia Reina Valera 1960

2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 sino que se deleitan en la ley del Señor meditando en ella día y noche.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 mas le agrada la Ley del Señor y medita su Ley de noche y día.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 Sino que en la Ley de YHVH está su delicia, Y en su Ley medita° de día y de noche.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche.

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Salmos 1:2
24 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Que el libro de esta ley no se aparte de tu boca; medita en él día y noche para que procures actuar conforme a todo lo que en él está escrito, y así prosperarás y tendrás éxito en tus empresas.


Si en tu ley no tuviera mis delicias, hubiera perecido en mi miseria.


en mi interior escondo tus palabras, a fin de no pecar en tu presencia.


Porque, en lo íntimo de mi ser, me complazco en la ley de Dios;


Aparecían tus palabras y yo las devoraba; tu palabra era mi gozo y la alegría de mi corazón, pues sobre mí se invocaba tu nombre, Yahveh, Dios Sebaot.


Encáuzame por la senda de tus leyes, que en ellas me complazco.


Aleluya. Álef. Dichoso el hombre que teme al Señor Bet. y tiene en sus mandatos su contento.


Que mi canto le sea grato: yo tengo en el Señor mi regocijo.


Y así digo: 'Aquí vengo'. En el rollo del libro está escrito que yo debo


Álef. Dichosos los que, sin mancha en su conducta, la ley del Señor toman por guía;


pues en esto consiste el amor de Dios: en guardar sus mandamientos. Sus mandamientos no son pesados.


he observado el mandato de sus labios, he guardado en mi pecho las palabras de su boca.


Preocúpate de esto, dedícate a ello plenamente, de suerte que tu progreso sea patente a todos.


Las leyes de tu boca cuentan más para mí que miles de monedas de oro y plata.


y ahora era viuda con ochenta y cuatro. No se apartaba del templo, sirviendo a Dios noche y día con ayunos y oraciones.


Doy gracias a Dios, a quien rindo culto, como mis antepasados, con conciencia pura, cuando te encomiendo incesantemente en mis oraciones día y noche.


Recordad, si no, hermanos, nuestros esfuerzos y fatigas: trabajando, día y noche, a fin de no ser una carga para ninguno de vosotros, proclamamos entre vosotros el evangelio de Dios.


Y ¿no hará Dios justicia a sus elegidos, que claman a él día y noche, aunque les haga esperar?


Canto. Salmo. De los hijos de Coré. En la enfermedad. Para cantar. De Hemán el indígena.


A la caída de la tarde salió Isaac a pasear por el campo y, alzando sus ojos, vio venir unos camellos.


porque Esdras había aplicado su corazón al estudio de la ley de Yahveh, para ponerla por obra y para enseñar en Israel sus mandamientos y preceptos.


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