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Proverbios 4:23 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

23 Por encima de todo, vigila tu corazón, porque de él procede la vida.

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Biblia Reina Valera 1960

23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

23 Sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque este determina el rumbo de tu vida.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

23 Primero que nada, vigila tu corazón, porque en él está la fuente de la vida.

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La Biblia Textual 3a Edicion

23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, Porque de él mana la vida.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

23 Con toda diligencia guarda tu corazón; porque de él mana la vida.

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Proverbios 4:23
21 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el malo, de su mal tesoro saca lo malo. Pues de lo que rebosa del corazón habla su boca.


Quien vigila su boca guarda su vida, quien mucho habla se perderá.


Nada hay más tramposo que el corazón y está desahuciado; ¿quién podrá entenderlo?


Porque del corazón salen las malas intenciones, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los robos, los falsos testimonios, las injurias.


Escucha, hijo mío, y sé sabio; orienta tu corazón al buen camino.


Necio es quien en sí confía, quien actúa con sabiduría será salvo.


Velad y orad, para que no cedáis a la tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil'.


Por tanto, guárdate y cuídate mucho de no olvidar las cosas que han visto tus ojos, ni dejes que se aparten de tu corazón en todos los días de tu vida y se las enseñarás a tus hijos y a los hijos de tus hijos.


Tened buen cuidado de que nadie se vea privado de la gracia de Dios; de que ninguna raíz venenosa, creciendo rápida, perturbe y contamine a la comunidad;


Lo primero es la sabiduría: adquiérela; da cuanto posees para comprar prudencia.


Hijo mío, ten prudencia y reflexión: que no se aparten de tus ojos;


Espinas y trampas en la senda del perverso; quien estima su vida las evitará.


La mujer agraciada logra estima, la que odia la justicia es asiento de infamia. Los perezosos carecen de bienes, los esforzados consiguen riquezas.


Pierde esas riquezas en un mal negocio y si le nace un hijo, nada tiene en sus manos para él.


Pero lo que sale de la boca procede del corazón, y esto sí que contamina al hombre.


Pero Jehú no procuró andar conforme a la ley de Yahveh, Dios de Israel, con todo su corazón ni se apartó de los pecados con que Jeroboán hizo pecar a Israel.


El camino de los justos es evitar el mal; quien vigila sus pasos guarda su vida.


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