Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Oseas 14:4 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Asiria no nos salvará, no montaremos a caballo, nunca más diremos que es nuestro dios la obra de nuestras manos, tú, en quien el huérfano encuentra compasión'.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

4 Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 El Señor dice: «Entonces yo los sanaré de su falta de fe; mi amor no tendrá límites, porque mi enojo habrá desaparecido para siempre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Asiria no nos salvará, ni confiaremos más en los caballos, ni a la estatua que hicieron nuestras manos volveremos a decirle Dios nuestro; en ti sólo encuentra compasión el huérfano.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Sanaré sus apostasías y los amaré por pura gracia, Porque mi ira ya se ha apartado de él.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

4 Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Oseas 14:4
30 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

he visto sus caminos. Pero voy a sanarlo y a guiarlo; voy a consolarlo. Y para sus afligidos


Aquel día dirás: 'Te alabo, Yahveh, pues aunque te habías enojado contra mí, se calmó ya tu ira y me has consolado.


Yahveh, tu Dios, está contigo. ¡Es un héroe que salva! Se gozará en ti con alegría, te renovará con su amor, dará gritos de júbilo por ti


Venid, volvamos a Yahveh: él nos desgarró, pero él nos curará; él nos hirió, pero él nos vendará.


Convertíos, hijos rebeldes, curaré vuestras rebeldías. Aquí estamos: venimos a ti; pues tú, Yahveh, eres nuestro Dios.


Aunque nuestras culpas nos acusen, actúa, Yahveh, por amor a tu nombre. En verdad, nuestras rebeldías son muchas, hemos pecado contra ti.


Pero el día en que apareció la bondad de Dios nuestro Salvador y su amor a los hombres,


quien nos ha salvado y llamado a una vocación santa, no según nuestras obras, sino según su propio designio y gracia, que se nos dio en Cristo Jesús desde la eternidad,


para alabanza de la gloria de su gracia, de la cual nos dotó en el Amado.


Pero, por gracia suya, quedan justificados en virtud de la redención realizada en Cristo Jesús,


Mi pueblo sigue apostatando de mí; aunque invocan a lo alto, nadie los levanta.


Mirad que voy a traerles la salud y la curación: voy a sanarlos y a descubrirles la riqueza de la paz y de la seguridad.


Sáname, Yahveh, y sanaré; sálvame y me salvaré, pues mi alabanza eres tú.


¿No hay bálsamo en Galaad, o no hay allí un médico? ¿Por qué, entonces, no se cierra la herida de la hija de mi pueblo?


Por eso los va a herir el león de la selva, el lobo de la estepa los devorará. El leopardo acecha junto a sus ciudades, todo el que salga de ellas será despedazado, porque muchas son sus transgresiones, sus apostasías son muy graves.


Mas él, enternecido, cubría su pecado y no los destruía, reteniendo su ira muchas veces, no dejando avivar todo su enojo,


'Pinjás, hijo de Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, ha alejado mi cólera contra los israelitas por haber mostrado su celo por mí en medio de ellos; por eso yo, en mi celo, no he aniquilado a los israelitas.


Dijo Yahveh a Moisés: 'Reúne a todos los jefes del pueblo y cuélgalos ante Yahveh, frente al sol, para que se aleje de Israel la cólera de Yahveh'.


Y dijo: 'Si escuchas de veras la voz de Yahveh, tu Dios, y haces lo que es recto a sus ojos; si prestas oído a sus mandatos y si guardas todas sus leyes, no te enviaré ninguna de las enfermedades con que he afligido a Egipto, porque yo soy Yahveh, el que te sana'.


¡Ea! Sedientos todos, venid a las aguas, -aun quien no tenga dinero-, venid; comprad y comed, venid y comprad vino y leche gratis, sin pagar.


¿Es Efraín para mí un hijo tan querido o un niño de tal predilección que siempre que hablo de él' lo recuerdo más aún? Por eso se conmueven por él mis entrañas y tengo que compadecerme de él' -oráculo de Yahveh-.


De la misma manera, aunque yo diga al malvado: '¡De seguro morirás!', si se convierte de su pecado y practica el derecho y la justicia;


Y las naciones que han quedado en torno vuestro sabrán que yo, Yahveh, he reedificado las cosas destruidas y he replantado lo devastado. Yo, Yahveh, lo he dicho y lo haré.'


Res. Tú mismo puedes ver, observar el pesar y la aflicción y tomarlos en tus manos. A ti el pobre se abandona, al huérfano eres tú quien le socorre.


Los unos con sus carros, los otros con caballos, nosotros invocando el nombre del Señor, nuestro Dios.


Quitaré de su boca los nombres de los baales, y nunca más se mencionarán sus nombres.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម