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Mateo 9:30 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Y se les abrieron los ojos. Jesús les advirtió severamente: '¡Cuidado que nadie lo sepa!'.

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Biblia Reina Valera 1960

30 Y los ojos de ellos fueron abiertos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

30 Entonces sus ojos se abrieron, ¡y pudieron ver! Jesús les advirtió severamente: «No se lo cuenten a nadie»;

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Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Después les ordenó severamente: 'Cuiden de que nadie lo sepa.

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La Biblia Textual 3a Edicion

30 Y se les abrieron los ojos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

30 Y los ojos de ellos fueron abiertos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa.

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Mateo 9:30
13 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Entonces le mandó que a nadie lo dijera, sino: 'Ve a presentarte al sacerdote y a ofrecer por tu purificación según lo mandó Moisés, para que tengan constancia de ello'.


Jesús le dijo: 'Cuidado con decírselo a nadie. Pero esto sí; ve a presentarte al sacerdote y a ofrecer el don que mandó Moisés, para que tengan constancia de ello'.


Sus padres quedaron llenos de estupor; pero él les encargó que no contaran a nadie lo sucedido.


Pero él les recomendó encarecidamente que nadie lo viniera a saber; y dijo que le dieran de comer a la niña.


Mientras iban bajando del monte, les mandó Jesús: 'No contéis a nadie esta visión, hasta que el Hijo del hombre haya resucitado de entre los muertos'.


pero les encareció con palabras enérgicas que no lo descubrieran.


Mirad: tendrá éxito mi siervo, será elevado, levantado, muy encumbrado.


para abrir los ojos a los ciegos, para sacar del calabozo al prisionero, de la cárcel a los que moran en oscuridad.


Entonces se despegarán los ojos de los ciegos, los oídos de los sordos se abrirán;


el Señor, el que a los ciegos da la vista, el Señor, el que pone en pie a los caídos, el Señor, el que ama al justo,


Luego lo despidió con esta severa advertencia:


Pero él, en términos severos, les conminaba que no lo divulgaran.


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