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Lamentaciones 2:6 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Váu. Forzó, como la de un jardín, su cerca, derribó su lugar de reunión. Yahveh hizo olvidar en Sión fiestas y sábados; rechazó en el furor de su ira al rey y al sacerdote.

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Biblia Reina Valera 1960

6 Quitó su tienda como enramada de huerto; Destruyó el lugar en donde se congregaban; Jehová ha hecho olvidar las fiestas solemnes y los días de reposo en Sion, Y en el ardor de su ira ha desechado al rey y al sacerdote.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Derribó su templo como si fuera apenas una choza en el jardín. El Señor ha borrado todo recuerdo de los festivales sagrados y los días de descanso. Ante su ira feroz, reyes y sacerdotes caen juntos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Ha forzado sus murallas como un huerto, ha destruido su lugar de reunión. Yavé ha hecho olvidar en Sión solemnidades y sábados; en el ardor de su cólera ha desechado al rey y al sacerdote.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 w Como un huerto, violentó su Tabernáculo: destruyó su lugar de reunión. YHVH ha hecho olvidar en Sión las fiestas solemnes y el shabbat, Y en el ardor de su ira rechazó al rey y al sacerdote.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 Y violentamente arrancó su tabernáculo como de un huerto, destruyó el lugar donde se congregaban; Jehová ha hecho olvidar en Sión las fiestas solemnes y los sábados, y en el ardor de su ira ha desechado al rey y al sacerdote.

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Lamentaciones 2:6
25 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

como en los días de fiesta, alejaré de ti la desgracia, el oprobio que pesa sobre ti.


Dálet. Los caminos de Sión están de luto, porque nadie acude a las fiestas; desiertas están todas sus puertas, sus sacerdotes gimen, se afligen sus doncellas, y ella misma está colmada de amargura.


Pe. El rostro de Yahveh los dispersó, no volverá a mirarlos. No hubo respeto a los sacerdotes, no se tuvo piedad de los ancianos.


Por eso, también yo os he hecho despreciables y viles ante todo el pueblo, de la misma manera que vosotros no habéis seguido mis caminos no habéis sido imparciales ante la ley.


Despreció el juramento y rompió la alianza. Mirad que él había dado su mano, y luego hizo todas estas cosas. No escapará'.


Con sus manos colgaron a los príncipes, no respetaron la faz de los ancianos.


Res. Nuestro aliento vital, el ungido de Yahveh, fue atrapado en sus fosos: aquel de quien decíamos: 'A su sombra viviremos entre las naciones'.


¿Serás, Yahveh, insensible ante estas cosas? ¿Callarás y nos humillarás hastas el extremo?


Por poco tiempo ha poseído tu pueblo santo el país; nuestros enemigos han pisoteado tu santuario.


Por eso execré a los jefes del santuario, entregué a Jacob al exterminio y a Israel a los ultrajes.


Pues ahora quiero deciros lo que voy a hacer a mi viña: quitaré su seto para que sirva de pasto; desportillaré su tapia para que todos la pisen.


No sigáis trayendo vana ofrenda, el incienso me es abominable. Novilunios, sábados, asambleas: festividad con crimen no la soporto.


La hija de Sión ha quedado como cabaña en viña, como choza en melonar, como ciudad sitiada.


has burlado la alianza de tu siervo, profanado por tierra su corona.


extendiste sus ramas hasta el mar y hacia el río sus vástagos.


En Judá el Señor es celebrado y su renombre es grande en Israel.


Pero si no me escucháis, si no santificáis el día del sábado dejando de transportar cargas y de pasarlas por las puertas de Jerusalén el día del sábado, entonces en sus puertas encenderé fuego que devorará los palacios de Jerusalén y no se apagará'.


Escuchad a los fugitivos y evadidos del país de Babel, que anuncian en Sión la venganza de Yahveh, nuestro Dios, la venganza de su templo.


Convertiré vuestras ciudades en montones de ruinas, derribaré vuestros santuarios y no aspiraré ya más vuestros aromas calmantes.


Han entregado al fuego el santuario y profanan por el suelo la mansión de tu nombre.


Haré de ella un erial: no se podará ni escardará, crecerán cardos y abrojos; mandaré a las nubes que no lluevan sobre ella.


Porque así dice Yahveh Sebaot, Dios de Israel: como se volcó mi ira y mi furor sobre los habitantes de Jerusalén, así se volcará mi furor sobre vosotros cuando entréis en Egipto: seréis execración y horror, maldición y oprobio, y no veréis más este lugar.


esto le has de decir: 'Así dice Yahveh: mira: lo que yo edifiqué, yo mismo lo derribo, y lo que yo planté, yo mismo lo arranco, así por todo el país'.


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