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Job 36:24 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

24 Acuérdate de ensalzar su obra que tantos hombres cantaron.

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Biblia Reina Valera 1960

24 Acuérdate de engrandecer su obra, La cual contemplan los hombres.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

24 En cambio, glorifica tú sus obras poderosas, entonando canciones de alabanza.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

24 Acuérdate, pues, de ensalzar su obra, después que tantos hombres la alabaron.

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La Biblia Textual 3a Edicion

24 Acuérdate de engrandecer su obra, De la cual han cantado los hombres,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

24 Acuérdate de engrandecer su obra, la cual contemplan los hombres.

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Job 36:24
26 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

cantan el cántico de Moisés, siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: 'Grandes y admirables son tus obras, Señor, Dios todopoderoso; justos y verdaderos tus caminos, rey de las naciones.


Dijo entonces María: 'Canta mi alma la grandeza del Señor,


Bendito sea el Señor, Dios de Israel, único hacedor de maravillas:


Di orden de que vinieran a mi presencia todos los sabios de Babilonia, a fin de que me dieran a conocer la interpretación de mi sueño.


Él hizo la tierra con su poder, fundamentó el mundo con su sabiduría y extendió el cielo con su inteligencia.


enaltecen las sendas del Señor, pues es grande la gloria del Señor.


Sámek. Por los siglos, por siempre, están establecidos, Ain. con verdad y equidad han sido hechos.


Den gracias al Señor por sus favores y por sus portentos con los hombres,


Den gracias al Señor por sus favores y sus portentos con los hombres,


¡Cuántas son, Señor, tus obras, fruto todas de tu sabiduría! De tus propias criaturas la tierra está repleta.


Van vagando por comida y, al no saciarse, rondan en la noche.


Bet. Mi alma se gloría en el Señor y, al oírlo, se alegran los humildes.


No se dan a meditar las obras del Señor ni las acciones de sus manos: que los destruya él y no los reconstruya.


Y cuando levantes tus ojos al cielo y veas el sol, la luna, las estrellas y todo el ejército del cielo, no te dejes seducir ni te postres para rendirles culto y servirles. Yahveh, tu Dios, los ha repartido entre todos los pueblos bajo el cielo;


Entonces Moisés y los israelitas entonaron este cántico a Yahveh: Cantaré a Yahveh, pues se cubrió de gloria: precipitó en el mar caballos y jinetes.


Aquel día, Débora y Barac, hijo de Abinoán, entonaron un cántico diciendo:


Cantadle y celebradle, meditad en sus portentos;


Todo mortal la contempla, el hombre la mira desde lejos.


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