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Job 19:14 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Han desaparecido mis vecinos y allegados, me han olvidado los huéspedes de mi casa.

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Biblia Reina Valera 1960

14 Mis parientes se detuvieron, Y mis conocidos se olvidaron de mí.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Mi familia se ha ido y mis amigos íntimos se olvidaron de mí.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Ya no me ven parientes ni familiares, me olvidaron los allegados a mi casa.

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 Me han faltado mis parientes, Y mis amigos íntimos se han olvidado de mí.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

14 Mis parientes me han fallado, y mis amigos cercanos se han olvidado de mí.

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Job 19:14
14 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Mi corazón palpita, mis fuerzas me abandonan y la luz misma de mis ojos no cuenta para mí.


No lo digo por todos vosotros pues sé bien a quiénes escogí. Pero cúmplase la Escritura: El que come el pan conmigo, ha levantado su calcañal contra mí.


El hermano entregará a la muerte al hermano y el padre al hijo, y los hijos se levantarán contra sus padres y les darán muerte.


Yo oía el cuchicheo de la gente: ¡Terror en derredor! ¡Denunciadlo! ¡Denunciémoslo! Todos mis amigos están espiando un desliz mío: 'A ver si se deja seducir; le dominaremos y de él nos vengaremos'.


Hay amigos que llevan al fracaso, y los hay más fieles que un hermano.


Los consejos que daba Ajitófel eran tenidos por entonces como oráculos de Dios, así eran estimados todos los consejos de Ajitófel, tanto por David como por Absalón.


El jefe de los coperos no se acordó más de José, sino que se olvidó por completo de él.


Mis criadas me toman por extraño, forastero soy a sus ojos.


Todos mis íntimos me aborrecen, los que yo amaba se han vuelto contra mí.


Bet. Pasa las noches llorando, las lágrimas surcan sus mejillas. No hay quien la consuele entre todos los que la amaban. Todos sus amigos la han traicionado, se le han vuelto enemigos.


Acudieron entonces a él todos sus hermanos y hermanas y todos sus antiguos conocidos. Comieron con él en su casa, le expresaron su condolencia y lo consolaron por todas las desventuras que Yahveh le había infligido. Cada uno le regaló una moneda de plata y un anillo de oro.


Para mis opresores soy ludibrio y un objeto de escarnio a mis vecinos; para mis conocidos un espanto: al verme por la calle me rehúyen.


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