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Isaías 44:15 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 Sirve a la gente de combustible, pues toma una parte y se calienta. También lo enciende y cuece pan. También hace un dios y lo adora, lo hace un ídolo y lo venera.

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Biblia Reina Valera 1960

15 De él se sirve luego el hombre para quemar, y toma de ellos para calentarse; enciende también el horno, y cuece panes; hace además un dios, y lo adora; fabrica un ídolo, y se arrodilla delante de él.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

15 Luego usa parte de la madera para hacer fuego, y con esto se calienta y hornea su pan. Después, aunque parezca increíble, toma lo que queda y se hace un dios para rendirle culto; hace un ídolo y se inclina ante él.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

15 El hombre ya tiene para hacer fuego, para calentarse y para cocer el pan. Pero también fabrica con esa madera un dios para agacharse delante de él; se hace un ídolo para adorarlo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

15 Luego se sirve de ellos como leña y toma de ellos para calentarse, también prende el horno y cuece panes, también hace un dios y lo adora, fabrica un ídolo, y se postra ante él.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

15 De él se sirve luego el hombre para quemar, y toma de ellos para calentarse; enciende también el horno, y cuece panes; hace además un dios y lo adora; fabrica un ídolo y se arrodilla delante de él.

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Isaías 44:15
10 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Cuando regresó Amasías de derrotar a los edomitas, se trajo consigo los dioses de los hijos de Seír: los constituyó por dioses suyos, se postró ante ellos y les ofreció incienso.


El resto de los hombres, los que no fueron exterminados por estas plagas, no se convirtieron de las obras de sus manos, de modo que no dejaron de adorar a los demonios y a los ídolos de oro y de plata y de bronce y de piedra y de madera, que no pueden ver ni oír ni andar.


¡Reuníos y venid! ¡Acercaos todos juntos salvados de las naciones! No entienden los que llevan su ídolo de madera y suplican a un dios que no salva.


Quien forma un dios, un ídolo funde que de nada sirve.


Pero después de la muerte del juez volvían a corromperse más aún que sus padres: se iban tras dioses extraños, les daban culto y se postraban ante ellos, y no renunciaban a sus prácticas perversas ni a su empedernida conducta.


Va a cortar unos cedros, tala un roble o una encina que escoge entre los árboles del bosque, o planta un abeto, que la lluvia hace crecer.


Una mitad la quema en el fuego, sobre sus brasas asa la carne, come el asado y queda harto. También se calienta y dice: '¡Ah!, me he calentado, noté el calor'.


El resto lo convierte en un dios, en su ídolo que luego venera, que lo adora y le ruega diciendo: 'Sálvame, que eres mi dios'.


Los que malgastan el oro de la bolsa y la plata en la balanza sopesan, contratan a un orfebre que haga con ello un dios, ante él se inclinan, se postran,


Su país está lleno de dioses: adoran la obra de sus manos, lo que hicieron sus dedos.


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